sábado, 14 de marzo de 2009

NN

Desde cuándo fue que te vi.
No lo recuerdo muy bien, en una semana de abril.
Tú estabas tan linda bajo el piélago matizado,
Yo estaba comprometido, con mis sentimientos templados.
Una reunión a la semana nos juntaba,
Reunión para mí en un inicio sin sentido, donde se alababa
Al señor tu Dios que yo aún no he conocido,
Tal vez desde ese día he mentido, ¿he de volver a hacerlo?

Cánticos y rezos,
Yo divagaba entre abstracciones y sus besos,
Creo en ese tiempo yo la amaba y ella a mí
Lo que impidió que yo me acercará a ti,
Pues eras y eres peligrosa señorita preciosa.
Yo te miraba y a veces tu también,
Comunicación vaga difusa, todo terminaba con un amén.
¡Rápido todos a misa! Un beso fugaz y una despedida a prisa.

Yo la seguía amando y tú con tu vida,
Cómo fue entonces que seguía contigo en crecida,
Usurpando mi tiempo, de segundo en segundo sumando
Todos los minutos aumentando.
Pero yo sabía todo debía terminar,
No más de dos años decía el contrato y mira donde fuimos a parar.
Yo la dejé de amar y ella a mí
Justo a tiempo para no volver a pensar en ti.

Se fueron mis días, semanas y meses,
Hasta que te reencontré en una graduación,
Ironía del señor ponerte de nuevo en mis tiempos,
Desde ahí ya no has salido otra vez de mis momentos.
Para mí hablarte fue una odisea colosal,
Temblaba, nervioso, espanto, ¿tú? Un ángel tal cual.
Como te recordaba, como eres,
Como siempre serás.


Ahora obligaciones estorban,
Estudios y un futuro se amoldan.
Me han dicho tú ya tienes un trazado,
Alguien ocupa tu rojo enarbolado.
De todas formas he de confesar nunca tuve esperanza,
Tú siendo tal cual eres y yo como he sido,
No podría ser que nos quisiera unir el destino,
Resignación, ¿conocida por mi? Pocas veces, sólo esta me ha dolido así.

Caminaré al patíbulo de mi vergüenza,
Dónde tantos saben de mí y mis pecados.
Si es la forma de volver a verte feliz seré colgado.
Una sola hora a la semana te veré
Y tan sólo en 60 minutos te adoraré.
¿Hablarte? Lo justo y necesario,
¿Conquistarte? Ni pensarlo, ni por mil rosarios.
No puedo arriesgarme, tomar la chance de saber…

Ajustaré mi vida, mis estudios, mis tonterías,
Ahora por ti me jugaré esta partida,
Aunque no podamos estar juntos,
Te juro con este pincel te crearé un mundo.
Fijarse usted señorita en mí ni pensarlo,
Sólo entre sábanas y cojines puedo idearlo.
Aunque en silencio te seguiré adorando,
Con resignación, con luz, con mis 60 minutos.

Bajo mis párpados crepusculares,
Ahí es cuando apareces inmensa como los mares;
Terrible como una tormenta, con una bella sonrisa,
Trampa de mil infieles como una sirena o la mona lisa.
Siempre candente, atenta con toda la gente,
Con tu suave voz que me mantiene atento,
A cada nota, a cada movimiento lento
De tus labios, precisos como dos olas al son de un claro de luna.

Te quiero, te quiero en mi vida,
“aunque lo confieso eres tan perfecta que te tengo envidia”
Lo que deseo, deseo y más ansío,
Es que algún día tu corazón sea mío,
Me juramento ante tú señor tú Dios
Si algún día seas mi princesa y yo tu caballero
Dejaré de lado mis pecados postreros,
Por ti todo lo daría.

Si lo piensas yo no te conozco ni tú a mí,
Todo esto es un absurdo me avergüenzo de mis letras,
Pero con mi fe te conozco, sé como debes ser,
Tal como te he soñado despierto cada día y cada vez.
Por eso sé que no te merezco ni nunca lo haré;
“Firmé un pacto con lucifer, con ese vil ser”
Si algún día te enamoro mi alma se la llevará él,
Por eso nunca debo llegar a saber…

Si tú y yo somos el uno para el otro,
Tal como en mis cuentos lo compongo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me gusto: cosa que leo tya me parsn declaraciones. pro el principio no me calza con el final...