martes, 15 de julio de 2008

Desierto Celestial

Desierto Celestial

Me veo aún esparcido,
Como olvidado por la dicha,
Hasta olvidar aquella sonrisa

Que me dio tu candor.

Perdido vago por las vías
Afluentes de esta gran ciudad,
Olvidando el tono abovedado
Y queriendo matar el tiempo en asfalto.

Te repito, es que no he podido
Llorarte para sacar,
Todo el dolor que tengo en mi interior,

Pues es más una enfermedad
Sin cura ni razón.
Una locura incomprendida
Que has preferido ignorar,
Y si me preguntas ¿por qué balbuceo “te repito”?
Será porque tampoco has escuchado
Lo que mis alaridos braman al mundo.

Tal vez quiero creer,
Que ya me cansé, harté, maté…
Verás por fin puedo observar

La belleza que había reprimido,
Que me rodeaba y me quería enseñar,
Que no todo estaba perdido.
Y al preciar de nuevo, como por primera vez

Camino a tu hogar el cielo,
Una señal me habló.

Enviada quizás por el divino,
¿Quién sabe si de phi? ¡Solo entiendo que jamás de ti!

Una señal que me salvó,
Que era sólo para mí.
Y no seas envidiosa pues quise comunicar,
Mostrarte el esplendor de la salvación,

Tuya, mía, de todos…
Te indiqué, con cinco te guié,
Te fijaste pero no amaste.
No pudiste hablar el mismo dialecto

De los dioses y comprendo,
Ese Dios que te habla a ti no es Dios verdadero.


Yo si amé y entendí… Debía ser un médano.


No lo encontré en el mar ni en erial.
Pendía sobre nuestras cabezas,
Puede ser por eso
Que mucho tiempo inadvertido permaneció

Para quien melancólico estuvo.

Y fue un llamado para derramar
Muchas más lágrimas,
Pero ya no más
Por quien no ama ni deja amar.
Sino por el esplendor
De ese desierto celestial.
Verdadero espectáculo ver suspendido,
Bajo las estrellas y sobre el orbe
Gigante macizo nómada,
Viajero de mil puertos no atado a ningún destino,

Sin fin de fines, sólo el vendaval ha de guiarte.
Así seré yo, así he de viajar ahora en adelante,

Fluir por el sendero hasta volver a encontrar
Nueva felicidad por un nuevo candor
¿Qué me dará la misma sonrisa?
No lo creo,
Pero sí que ya ha llegado quien me haga olvidar
Todo trago amargo.
Te explico, después de probarte,
Degustar hasta extasiarme,
No puedo volver sobre el mismo camino, no otra vez.
Gracias por existir, !gracias por ser tú!

¡A quien le haya robado el beso más dulce!
!Que jamás nadie me haya logrado obsequiar!

Verdadero Desierto Celestial.

1 comentario:

AnGeLa[!]* dijo...

mmmmm estalindo, se caxa q lo escribiste tú & es lo q sentí& bña blá, no diré nada, para que, tu tienes "claro" lo que crees, sientes & waxmingo.
Lindas las fotos, ovbio, de mi casa, sii las tomamos los 2 xd, ese dia que nos asaltaron & nunca mas nos vimos..